COMPOSICIÓN HÁPTICA Y OLFATIVA
Desde la postura del artista futurista Luigui Russolo que puso en evidencia a inicios del siglo XX el ruido como la nueva normalidad de la acicalada época industrial que había obviado el fragor de las máquinas a vapor olvidando que un tiempo antes el silencio era la normalidad de la vida cotidiana, en nuestros días la pandemia nos presenta a la humanidad un nuevo caso de nueva normalidad que poco a poco obvia el estado de sanidad humano precedente para hacer normal la enfermedad, el cuidado, la vacuna, la apoteosis de nuevos instrumentos de control social como son las mascarillas, los dispensadores de alcohol, los termómetros, los oxímetros y demás; al que los artistas plásticos han de poner atención para tomar ese obviar y convertirlo en un objeto de estudio artístico.
En la asignatura de Composición Háptica y Olfativa cerramos el período académico 2021.1 investigando la nueva normalidad y los elementos odorantes. Para ello se ha conceptualizado el olor como un elemento para decantar las manifestaciones culturales y para establecer la pérdida de este sentido físico del olfato por parte de la humanidad que se niega sino al confort y al olor agradable. De Cristina Larrea se extrajo los fundamentos del estudio de aquello que también el humano ha obviado y que es el miasma, el hedor, haciéndose inmune a tal situación perceptible que podría permitir nuevas alternativas, al ampliar el espectro sensitivo, para la creación de nuevas posibilidades en el estudio artístico.
El misma más la pandemia es entonces la investigación que los estudiantes han ejecutado siguiendo las directrices de interpretación de autores como Damien Hirst, Cristhope Laudamiel, Wolfgang Georgdorf y una parodia de Futurama el "oloroscopio"
El olor, los elementos odorantes, los miasmas, están todavía en pañales en cuanto versa la investigación artística solo enfocada, al momento, en lo visual.
Erick Bojorque
No hay comentarios:
Publicar un comentario